En el pleno de este viernes se prevé la aprobación definitiva de esta ordenanza por la que más de 350 familias podrán volver a disfrutar esta rebaja fiscal que se les eliminó en la anterior legislatura. También se elimina el recargo por vivienda desocupada.
Este jueves, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Galapagar lleva para su aprobación definitiva la nueva ordenanza fiscal que regula el Impuesto de Bienes Inmuebles en Galapagar. Una ordenanza que será especialmente beneficiosa para muchas familias numerosas de Galapagar que se habían quedado fuera de las bonificaciones ya que en la anterior legislatura había condicionado la rebaja fiscal al IPREM.
Tal y como señala la alcaldesa, Carla Greciano, «se trata de una promesa electoral cumplida y con la que este equipo de gobierno se ha comprometido muy especialmente dada su sensibilización hacia las necesidades de las familias del municipio y así dar respuesta a aquello que más les preocupa como es la economía de sus hogares».
De esta manera, una vez que se apruebe en el pleno del próximo jueves, la ordenanza entrará en vigor el 1 de enero y, todas aquellas familias que el año pasado se quedaron fuera de esta bonificación, deberán de solicitar la bonificación en el Ayuntamiento (por la sede electrónica o de forma presencial) antes del 31 de enero de 2024. Estas solicitudes serán todas aplicables para dicho ejercicio y sucesivos hasta la caducidad del Título de Familia Numerosa.
Además, es necesario reseñar otros beneficios fiscales que serán aplicables a partir de 2024 relacionados con el IBI. Es el caso de la bajada del tipo de gravamen que tendrá un descenso porcentual anual del 0,01%. Igualmente se prevé una nueva bonificación para bienes inmuebles en los que se hayan instalado puntos de recarga para vehículos eléctricos y se mantiene la bonificación para bienes inmuebles en los que se hayan instalado sistemas para el aprovechamiento térmico o eléctrico de la energía proveniente del sol. Por último, se ha eliminado el recargo hasta ahora existente por vivienda desocupada, que, tal y como señala la alcaldesa de Galapagar «era un impuesto absolutamente ideológico, que implantó el anterior gobierno y que lo único que hacía era penalizar a las familias que han invertido para tener en segunda residencia en nuestro municipio».
