En nuestra opinión, José Manuel Soto no faltó el respeto a ningún vecino, ni siquiera a los votantes socialistas, como afirman desde el PSOE local en una nota de prensa de ayer. Tampoco costará 12.000 euros a las arcas municipales, como dan a entender los socialistas en su nota, desmentida hoy por el Ayuntamiento de Torrelodones.
Un viernes de agosto por la noche, Soto insultó a través de una red social al presidente en funciones, mentando a su madre y a las madres de «los millones que están de acuerdo con que España esté en manos de sus peores enemigos»; cuestión que indignó a algunos socialistas que se sintieron aludidos.
«El señor Soto se permitió el lujo de faltarle al respeto a los 4.000 vecinos y vecinas de nuestro municipio que decidieron apoyar en las urnas tanto al PSOE como a otras opciones de progreso»; expresó el Secretario General del PSOE local, Víctor Ibáñez.
Soto borró el exabrupto, y poco después se disculpó públicamente. «La otra noche hice un comentario inapropiado en Twitter refiriéndome despectivamente a Pedro Sánchez y a las personas que están de acuerdo con la destrucción de España. Fue un error, la razón se pierde cuando se insulta, pido humildemente disculpas, no volverá a ocurrir», expresaba el artista el pasado 20 de agosto.
A nuestro modo de ver, Soto cometió el error de exponer públicamente su opinión por escrito y con palabras malsonantes. Opinión que de haberse vertido sin insultos y con un tono más moderado, seguramente compartiría la inmensa mayoría de ciudadanos españoles; incluyendo los socialistas comprometidos con la unidad de España, que son muchos.
«Entendemos y respetamos la discrepancia por parte de una persona que está situada en nuestras antípodas ideológicas, pero no compartimos ni compartiremos los gruesos insultos que dedicó a los votantes progresistas, al presidente del Gobierno y a su familia”», continúa la nota de los socialistas.
El PSOE critica que, «a pesar de los gravísimos insultos que este cantante lanzó contra los votantes progresistas, el gobierno de PP y VOX le haya invitado expresamente a realizar una actuación en Torrelodones, que no estaba programada, y que va a suponer al menos 12.000 euros de gasto que pagarán todos los vecinos con sus impuestos»; esto último ha sido desmentido por el Ayuntamiento en un comunicado de hoy.
«En relación con la nota de prensa emitida por el Grupo PSOE de Torrelodones en el día de ayer, desde el Ayuntamiento de Torrelodones queremos precisar que es absolutamente falso que se hayan “regalado 12.000 euros a José Manuel Soto”», indica el comunicado municipal. «El concierto, que tendrá lugar el próximo viernes a las 19:30 en el Teatro Bulevar de la Casa de la Cultura, es de pago, costando cada entrada 20 euros. Esta práctica es habitual en nuestro municipio, como en la inmensa mayoría de municipios de España. La programación cultural del ayuntamiento, por demás, no debe ni puede ser la programada por el anterior equipo de gobierno, dado que los vecinos de Torrelodones votaron cambio el pasado 28 de mayo. Por tanto, hay cambios en la misma, como sucederá, por ejemplo, en Navidad», añaden desde el Ayuntamiento.
Continuando con la opinión de nuestro medio, Soto no insultó «a todos» los votantes socialistas: ¿O es que todos los socialistas de Torrelodones están de acuerdo con la destrucción de España?¿Realmente están todos los simpatizantes del PSOE de acuerdo con las concesiones que Pedro Sánchez pretende hacer a «los peores enemigos» de España? Seguramente, no. De hecho, así lo han manifestado reconocidos líderes de ese histórico partido.
¿Soto, no; Willy Toledo, sí?
La polémica actual nos ha recordado otra polémica situación, en la que los socialistas tomaron otra postura. No nos gusta emplear la trillada frase de «la doble vara de medir». Pero en ocasiones resulta de aplicación.
Hace unos años —siendo Elena Biurrun la alcaldesa por Vecinos por Torrelodones—, hubo una polémica parecida a la actual. La regidora —que más adelante sería Jefa de Gabinete del ministro Escrivá—, contrató entonces para representarse en el mismo escenario en el que José Manuel Soto actuará mañana, la obra «El Rey». Dos de los tres miembros del elenco eran actores acusados de separatistas y proetarras: Alberto San Juan y Willy Toledo.
La actuación, que figuraba en el catálogo ofrecido a la Red de Teatros de la Comunidad de Madrid, aquel semestre fue contratada por Torrelodones y otros cuatro ayuntamientos gobernados por partidos progresistas: dos gobernados por el PSOE, uno por IU, otro por Ganemos, y el último por VxT.
Poco antes de actuar en Torrelodones, Willy Toledo se había fotografiado abrazado a Otegui. Además, con ocasión del 12 de Octubre del año anterior, el actor publicó en las redes: «Me cago en el 12 de octubre, en la fiesta nacional, en la monarquía y sus monarcas, en el descubrimiento, me defeco en los conquistadores codiciosos y asesinos, me cago en la conquista genocida de América, en la Virgen del Pilar y en todo lo que se menea. Nada que celebrar. Mucho que defecar».
«Yo me cago en Dios y me sobra mierda para cagarme en el dogma de la santidad y virginidad de la Virgen María. Este país es una vergüenza insoportable. Me puede el asco. Iros a la mierda. Viva el coño insumiso», diría tiempo después el impresentable niño pijo y católico, devenido en comunista y ateo tercermundista.
El deleznable Toledo, tras insultar o herir la sensibilidad de prácticamente la totalidad de españoles y a los cientos de millones que profesan la religión más extendida en el mundo, fue recibido sin ninguna crítica en Torrelodones y otros municipios (exceptuando la del Partido Popular). Vecinos por Torrelodones lo contrató, y los dirigentes del PSOE de aquel entonces no dijeron absolutamente nada; quizás considerando que el ejercicio de la libertad de expresión de Willy Toledo prevalecía sobre los sentimientos patrióticos o religiosos de la mayor parte de la población española. Pero no son los derechos fundamentales en colisión lo que queremos destacar, sino la posición del PSOE de varios municipios, en un caso u otro.
Soto fue vetado y le cancelaron conciertos; a Toledo, no. Pareciera que para el PSOE, una cosa es defecarse en Dios y la Virgen María; y otra muy distinta es hacerlo en el excelentísimo Señor Presidente, D. Pedro Sánchez y su señora madre. Faltaría más.