Un millón de euros invertirá el municipio este año para mejorar sus viales, a través de un Plan elaborado en base a las prioridades planteadas por los vecinos en las sucesivas reuniones con el alcalde y el concejal de Urbanismo, que se desplazaron para conocer in situ las necesidades más acuciantes a través del programa «Alcalde a domicilio».
El alcalde de Galapagar, Daniel Pérez Muñoz, y el concejal de Urbanismo, Ángel Camacho; explicaron esta mañana a los medios el alcance de los trabajos de mejora, que afectarán una quincena de calles, abarcando la remodelación de 7.000 m2 de viales, además de la renovación de la red de agua de algunas zonas de la localidad.
En total, el Ayuntamiento ha anunciado la inversión de 1 millón de euros para el asfaltado de viales, la remodelación de acerados y pavimentos, la eliminación de barreras arquitectónicas o la renovación de redes de saneamiento. Es lo que el Alcalde de Galapagar ha calificado como la «continuación al Nuevo Galapagar que comenzó ya hace más de 7 años». «Ahora continuamos con este proyecto, mejorando calles, ensanchando aceras y, en general, dando respuesta a las necesidades que nos transmiten los vecinos». Al comentar las mejoras que se realizarán a la entrada de Galapagar desde la carretera de Torrelodones, el regidor manifestó con entusiasmo: «Queremos que la gente cuando entre se enamore de Galapagar».
El plan responderá a diversas necesidades, como las de la calle Escuelas, la calle Pedriza o la calle Ortega y Gasset. En total 7.000 metros cuadrados de asfalto de viales para decir adiós a incómodos baches y pavimentos deteriorados.
En el caso de las calles Procesiones, Veracruz, Príncipe o Saeta, el cambio será también importante, ya que los trabajos serán para reformar el acerado y pavimento, actuando directamente en la eliminación de barreras arquitectónicas y ensanchando aceras.
Igual ocurrirá en calles como Fuente Cazorla o Noria, que lejos del parcheado puntual que se ha hecho en el pasado, ahora se remodelarán de forma completa para responder a la demanda de los propios vecinos. O como es el caso de la calle Escorial, frente al Colegio Carlos Ruiz, que a petición de las familias del centro, se reformará la acera y se eliminarán obstáculos para garantizar la seguridad de las familias y en especial de los niños, además de facilitar el paso para carritos de bebé o personas con movilidad reducida. «Galapagar ha sido siempre muy incómodo para transitar y lo vamos a mejorar», afirmó el alcalde.
Las mejoras continuarán. El alcalde recordó que el municipio continúa teniendo muchas calles de tierra, lo que significa «polvo en verano y barro en invierno» y que hay zonas con fosas sépticas. El objetivo es continuar progresivamente en los próximos años para completar el objetivo marcado por el equipo de Daniel Pérez Muñoz de lograr un municipio «más accesible y más cómodo y seguro para peatones y conductores».
El concejal de Urbanismo, Angel Camacho, afirmó que estos trabajos se completarán además con otra partida de 300.000 euros «para continuar manteniendo y conservando las mejoras de los últimos años; sin olvidar otras inversiones previstas en alumbrado, mejora de parques infantiles y remodelación de zonas verdes».
Daniel Pérez Muñoz informó que «no tenemos que pedir ningún crédito para acometer estas obras», sino que los fondos son del propio Ayuntamiento; y aprovechó al finalizar su intervención para «recordar a los vecinos que tienen a su disposición la Línea Verde», el programa a través del cual los propios vecinos pueden comunicar las incidencias que detecten (fugas de agua, alcantarillado, alumbrado público, limpieza urbana, etc.). Prácticamente el 85% de las incidencias planteadas en la Línea Verde son resueltas, pero «trabajamos para conseguir resolver el 100%», aseguró el concejal Ángel Camacho.
