Como complemento de la conferencia que se celebró el 19 de Marzo en el Teatro Bulevar de la Casa de Cultura sobre “El patrimonio de Torrelodones a través de caminos y encrucijadas”, el pasado domingo 24 de marzo, se desarrolló la visita guiada, por diversos lugares históricos y emblemáticos del pueblo de Torrelodones, organizada por la Sociedad Caminera del Real de Manzanares.
Tras las palabras iniciales del presidente de los camineros, Ricardo Roquero, el recorrido comenzó a las puertas del Ayuntamiento, donde se había congregado un grupo de personas para participar del paseo cultural.
Los camineros Elena Romero, Alberto del Río y Cruz Calle, fueron explicando de forma breve y amena los hechos históricos correspondientes a cada lugar del recorrido.
La primera explicación correspondió a la utilidad del arca de 1816 (guardada actualmente en el Ayuntamiento) que se usaba para archivar todos los documentos importantes del ayuntamiento y que tenía tres llaves que estaban en posesión del Alcalde mayor, un regidor y el escribano del Concejo.
La siguiente parada, fue en la reproducción del mojón de las cinco Leguas, que era una prerrogativa para pagar impuestos, posteriormente enseñaron la entrada a un refugio de la Guerra Civil, cerca de la Avenida de Valladolid, desde donde nos mostraron la Atalaya y donde estaba el antiguo matadero, a continuación se pasó por la Iglesia de la Asunción, el arca de piedra del Agua, transitaron por un tramo que aún existe del cauce del arroyo de Torre, pasaron por la Avenida de la Dehesa, más tarde llegaron al parque JH desde donde se apreciaron las casas antiguas del barrio Vasco y el recorrido concluyó, en la antigua panadería y la Posada donde pernoctaba Felipe II en sus viajes al Escorial para ver los progresos en la construcción del Monasterio.
Durante todo el camino, los participantes en el mismo, hicieron numerosas preguntas sobre los distintos monumentos y lugares visitados, que fueron contestadas puntualmente por los camineros.
Interesante e ilustrativa conferencia
La visita guiada referida, fue complementaria a la interesante conferencia que tuvo lugar unos días antes, bajo el título “El patrimonio de Torrelodones a través de caminos y encrucijadas”. Fueron ponentes de la misma, los arquitectos Elena Romero y Eduardo Paniagua. Romero está especializada en proyectos de intervención en el patrimonio histórico y Paniagua en la protección del patrimonio de la Comunidad de Madrid.
«La mejor manera de proteger el Patrimonio, es conocerlo», expresó Elena Romero al principio de su intervención, en el que destacó la importancia del «territorio y paisaje como parte integrante del patrimonio». Durante la ponencia, apoyada en numerosas fotografías y planos, sobre diferentes periodos de la historia de Torrelodones y los diferentes asentamientos que su posición estratégica propiciaron, desde el periodo andalusí y hasta la llegada del ferrocarril, realizaron muy interesantes revelaciones.
El 50% del territorio de nuestro municipio está sin prospeccionar, por lo que aún hay mucho por descubrir, afirmaron los ponentes, que asimismo destacaron la necesidad de «poner en valor» los recursos y darlos a conocer a los vecinos y visitantes, para lo que invitaron al Consistorio a trabajar en esa dirección.
Entre otras revelaciones, indicaron que las «Pinturas Rupestres» de Torrelodones, descubiertas en la década del 70 por los hermanos Sánchez Rubio, sin desmedro de su interés, no son realmente «rupestres», pues una vez analizadas, se descubrió la presencia de aluminio y titanio en la pintura utilizada.
Se tocaron temas tan variados como las sepulturas labradas en roca, presentes en la calle Carlos Picabea, así como la Atalaya de Torrelodones -posiblemente un «faro de fuego» para vigilar los caminos-, o el «Puente Romano», que catalogaron como «maravilla», y que parece ser más medieval que romano.
Se trató también la enorme influencia que tuvo para Torrelodones la construcción del Monasterio de El Escorial, cuando Felipe II hacía un alto en su camino hacia las obras, en «La Posada», así como la creación del llamado «Camino del Pardillo», que en aquella época se consolidó como vía de aprovisionamiento de los establecimientos existentes aquí.
Se habló también del s. XVIII, con el proyecto del Canal del Guadarrama y la Presa del Gasco, o las grandes transformaciones que se producen hacia 1864, con la llegada del ferrocarril, así como la gran influencia de la «arquitectura ferroviaria» en muchas de las construcciones urbanas actuales.
La Protección del Patrimonio, un concepto nuevo
No fue sino hasta con la Ley del 1976, cuando «comienza a hablarse» de protección del patrimonio. La Constitución del 78, también incorpora el concepto, y recién en 1980, se encargan los inventarios de los bienes a proteger. Hace muy poco, en 1986, puede decirse que comenzaron a protegerse los bienes de interés cultural. La sensación es que queda un largo recorrido y la necesidad de crear fórmulas para evitar que se continúe perdiendo el patrimonio, sin menoscabo de los intereses de los propietarios. Eduardo Paniagua puso de relieve la necesidad de invertir en patrimonio, no sólo como posibles recursos económicos, sino como herencia recibida a rescatar y valorar. «No sólo los grandes monumentos», deben protegerse, sino también «ese pequeño patrimonio que muchas veces da la entidad a un municipio».
Cerró el acto, Ricardo Roquero, presidente de la Sociedad Caminera del Real de Manzanares, entidad organizadora del ciclo de conferencias sobre Cultura y Patrimonio de Torrelodones. La tercera y última conferencia del ciclo será “La Guerra Civil en Torrelodones. Milicia y Población civil”, de la que serán ponentes Alberto del Río y Ernesto Viñas y tendrá lugar en el mes de mayo.
El Texto y las Fotografías correspondientes a la visita guiada, son gentileza de Fernando Villaverde.
[flagallery gid=66 name=Gallery]
Algunas imágenes de las decenas que se proyectaron durante la conferencia:
[flagallery gid=67 name=Gallery]
Es impresionante el trabajo que hace La Sociedad Caminera en Torrelodones.
Los mejores asesores, por sus amplios conocimientos y su dedicación, hay veces están entre nosotros.
Mi enhorabuena por el trabajo de esta asociación y mi apoyo en el objetivo de revalorizar el patrimonio y la historia de nuestro pueblo. Falta nos hace para volver a dar identidad a un municipio que con su crecimiento reciente ha perdido integración y solidaridad.