Esta noche, sobre las 2:00 de la madrugada, la propietaria de “Montón de Trigo”, una coqueta tienda que vende productos artesanales en la colonia de Torrelodones, recibía una llamada de la Guardia Civil, en la que le comunicaban la desagradable noticia de que habían entrado a robar en su local, ubicado en la calle Jesusa Lara, frente al parque Pradogrande.
Una vecina oyó el ruido cuando los ladrones rompieron el cristal blindado y dio rápido aviso a la Policía. Los uniformados llegaron de inmediato y a los ladrones no tuvieron oportunidad de llevarse más que la caja donde se guardan pequeñas cantidades de dinero –nunca ha más de 200 euros- comentó Carmen, la propietaria. Había en el local algunos elementos de relativo valor (equipo de música, marco digital, etc.) pero no tuvieron tiempo de alzarse con ello.
“Más que el destrozo o la cantidad robada, lo que fastidia es la impotencia, tener que venir de madrugada…”, comentó la propietaria, que hasta después de las 4:00, cuando la compañía de seguros colocó una chapa de hierro para sustituir el cristal blindado de la puerta, no se pudo ir a casa.
Gracias a la colaboración ciudadana, la Guardia Civil recuperó la caja robada que los cacos habían arrojado en una calle al final de la colonia, lógicamente ya sin el dinero, pero intacta.
Mañana 27 de abril, se cumplen dos años de la apertura de “Montón de Trigo”, que se ha hecho muy reconocida en la colonia gracias a sus exquisiteces, en especial unos pequeños y deliciosos croaissants –“los reyes de la tienda”- y a su gran variedad de tartas. Este ha sido el segundo robo que sufre la tienda en estos dos años. “No entiendo para qué se arriesgan a robar aquí…¿qué se pueden llevar, pan, pastas, tartas?”, se preguntaba Carmen.
Hace unos meses, en “Centro Bike”, el local de al lado de “Montón de Trigo” y que pertenece a un hermano de Carmen, se perpetró un importante robo. En esa oportunidad, los ladrones pudieron llevarse numerosas bicicletas de alto valor.
Sobre el robo de esta noche, la Guardia Civil comentó a la propietaria que «tiene pinta» de tratarse de un robo perpetrado por “quinquis”. Por la ubicación de la caja recuperada, conjeturaron que después de robar callejearon para dirigirse hacia el vecino municipio de Galapagar.
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Notas relacionadas:
El comentario hecho a la propietaria tiene un exceso de rigor: «tiene pinta» … «quinquis».
¡madre mía!