Un teatro Bulevar completamente abarrotado recibió el pasado sábado 23 de noviembre a la Banda Sinfónica Municipal de Música de Torrelodones, que dirige Jorge Mora. La garantía de calidad de sus conciertos hace que en estas convocatorias de la Banda, no quede ni una butaca sin ocupar. Era además, uno de los conciertos más importantes del año, en honor a Santa Cecilia, patrona de todos los musicos.
«Qué felicidad da la sensación del trabajo bien hecho, la sensación de haber hecho felices a otras personas… No, no nos ponemos cursis, pero, qué mejor manera de celebrar el día de Santa Cecilia, que disfrutando y haciendo disfrutar a los demás», expresaban desde el blog de la Banda, una vez finalizado el concierto. Concierto que sin duda ha llevado muchas horas de ensayo y dedicación, que han merecido la pena.
Los que se hayan perdido el concierto, tendrán oportunidad de verlo en los vídeos de más abajo; y los que asistieron, podrán revivirlo.
No faltaron momentos muy divertidos, que demuestran el excelente ambiente que reina entre los músicos, como el corte de la coleta que le practicó Jorge Mora a Javier Almeida, tras el solo de Bombardino de Lo Cant del Valencià, realizado por este; o cuando tras tocar «Rocky», los siete trompetistas —a indicación del director— levantaron sus trompetas triunfales al unísono.
Un momento emotivo se vivió, cuando Jorge Mora y toda la Banda le dedicaron el «Concerto D’Amore» a Leo —padre de Silvia (saxo) y Sergio (flauta)—, guitarrista que colaboró con la Banda en uno de sus conciertos, y ha fallecido recientemente.
El público no se quería ir, así que los músicos tocaron «Paquito El Chocolatero» como bis… y ante las insistentes peticiones de «¡Otra, otra!…, la Banda interpretó «Qué bonita es la Amapola», que todo el público cantó con ellos.
Tras el concierto, todos los integrantes de la Banda celebraron a su patrona en el restaurante Capone, donde además adelantaron la celebración del 34º cumpleaños del director, Jorge Mora (que es hoy, 25 de noviembre). Le regalaron una original tarta coronada por un «director de orquesta», adornada con los instrumentos de viento que más utiliza Jorge, y la leyenda: «Hubo un director que se murió con la batuta en alto».
En menos de un mes, podremos disfrutar nuevamente de los tradicionales conciertos que la banda realiza en diciembre.